Ya han desaparecido de la faz de la Tierra más de 150 especies de aves y 120, de mamíferos. Se calcula que en veinte años habrán muerto 10 millones de animales inocentes por causas que el hombre podría evitar: la caza indiscriminada, el tráfico de especies prohibidas y la alteración de los hábitats naturales.
Estas prácticas justificadas en nombre del progreso económico, a la larga terminarán resultando demasiado caras. La desaparición de la fauna ya está causando daños irreparables al ecosistema del planeta. Muchas de las especies desaparecidas son depredadoras naturales que protegen la vida del hombre y de los cultivos, controlando la reproducción de animales e insectos que son verdaderas plagas para los cultivos y las poblaciones.
Tanto más perjudicial resulta la desaparición de la fauna si se tiene en cuenta que más del 45% de los medicamentos se obtienen de fuentes naturales animales o son elaborados a partir de ellas. Además, el 75% de la población de los países subdesarrollados depende de los medios naturales para sobrevivir.
LAS ESPECIES YA EXTINGUIDAS
En la era secundaria fueron los dinosaurios, pero la modernidad también cuenta con un variado número de especies que ya no volverán: el antílope azul, el león beréber, el oso del atlas, el dodó, el petrel, el porón de Madagascar.
LAS QUE ESTAN POR EXTINGUIRSE
Si no se toman medidas urgentes corren franco peligro de desaparecer especies como el oso negro del Himalaya, el oso Grizzly de Canadá, el oso polar y el panda; la pantera negra africana, el rinoceronte negro africano -cada cuerno de este animal se paga cuarenta y cinco mil dólares porque se le atribuyen poderes afrodisíacos-, la tortuga gigante, la nutria y la ballena.
Estas prácticas justificadas en nombre del progreso económico, a la larga terminarán resultando demasiado caras. La desaparición de la fauna ya está causando daños irreparables al ecosistema del planeta. Muchas de las especies desaparecidas son depredadoras naturales que protegen la vida del hombre y de los cultivos, controlando la reproducción de animales e insectos que son verdaderas plagas para los cultivos y las poblaciones.
Tanto más perjudicial resulta la desaparición de la fauna si se tiene en cuenta que más del 45% de los medicamentos se obtienen de fuentes naturales animales o son elaborados a partir de ellas. Además, el 75% de la población de los países subdesarrollados depende de los medios naturales para sobrevivir.
LAS ESPECIES YA EXTINGUIDAS
En la era secundaria fueron los dinosaurios, pero la modernidad también cuenta con un variado número de especies que ya no volverán: el antílope azul, el león beréber, el oso del atlas, el dodó, el petrel, el porón de Madagascar.
LAS QUE ESTAN POR EXTINGUIRSE
Si no se toman medidas urgentes corren franco peligro de desaparecer especies como el oso negro del Himalaya, el oso Grizzly de Canadá, el oso polar y el panda; la pantera negra africana, el rinoceronte negro africano -cada cuerno de este animal se paga cuarenta y cinco mil dólares porque se le atribuyen poderes afrodisíacos-, la tortuga gigante, la nutria y la ballena.
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