El danio cebrado y el damio listado, verdoso o azul el primero y gris claro y color carne el segundo, se cuentan entre los más bulliciosos habitantes de los acuarios.
Necesitan recipientes de buen tamaño con una profundidad de 10 a 15 cm y agua a temperatura de 18 a 26° C. Conviene cubrir el fondo con gravilla muy fina, para que los huevos queden a salvo de la voracidad de los adultos.
Para la reproducción, conviene contar con dos machos por cada hembra. Cuarenta y ocho horas después de nacidas, hay que aislar a las crías, parecidas a finas agujas de cristal, y alimentarlas con infusorios y diminutos organismos planctónicos.
El pez Pompadour es relativamente nuevo en la lista de los ejemplares ornamentales de los acuarios. Tiene el cuerpo en forma de disco muy aplanado, y color pardo amarillento o bien oliváceo atigrado, con siete franjas verticales oscuras.
La cabeza, el vientre y las aletas asumen diversas coloraciones, desde el azul claro al rojo sangre. Necesita acuarios altos y espaciosos, iluminados desde arriba.
El agua debe ser aireada y cambiada por lo menos una vez cada semana, y se mantendrá a temperatura de 25 a 30° C. Su alimento suele estar constituido por moluscos, crustáceos diminutos y larvas minúsculas, que se le suministrarán de vez en cuando y en pequeñas cantidades.
Necesitan recipientes de buen tamaño con una profundidad de 10 a 15 cm y agua a temperatura de 18 a 26° C. Conviene cubrir el fondo con gravilla muy fina, para que los huevos queden a salvo de la voracidad de los adultos.
Para la reproducción, conviene contar con dos machos por cada hembra. Cuarenta y ocho horas después de nacidas, hay que aislar a las crías, parecidas a finas agujas de cristal, y alimentarlas con infusorios y diminutos organismos planctónicos.
El pez Pompadour es relativamente nuevo en la lista de los ejemplares ornamentales de los acuarios. Tiene el cuerpo en forma de disco muy aplanado, y color pardo amarillento o bien oliváceo atigrado, con siete franjas verticales oscuras.
La cabeza, el vientre y las aletas asumen diversas coloraciones, desde el azul claro al rojo sangre. Necesita acuarios altos y espaciosos, iluminados desde arriba.
El agua debe ser aireada y cambiada por lo menos una vez cada semana, y se mantendrá a temperatura de 25 a 30° C. Su alimento suele estar constituido por moluscos, crustáceos diminutos y larvas minúsculas, que se le suministrarán de vez en cuando y en pequeñas cantidades.