Un ataque de pánico es un trastorno de ansiedad que causa ataques repetitivos e inesperados repentinos de miedo intenso. Estos ataques pueden durar desde minutos hasta horas, dependiendo de la causa del ataque. La gente ha dicho que son las experiencias más aterradoras intensamente, alterando e incómodos de la vida de una persona. Es justo suponer que lo mismo es cierto para nuestras mascotas.
Algunas causas comunes pueden ser: reacción natural ante la amenaza, la ansiedad de separación, las tormentas, los extranjeros, la aversión a las personas de una cierta edad, raza o sexo, el miedo de otros perros, niños que viajan en vehículos, fuegos artificiales estacionales, pisos lisos, miedo de una experiencia terrible o ser puesto en una jaula.
Signos evidentes de lesión, sentirse indispuesto o irritable, un cambio en los hábitos de comer o dormir podría ser una señal de problemas subyacentes y aumentar el potencial de su perro que sufre un ataque de pánico.
Los ataques de perros de pánico puede ser un problema real. Un ataque de pánico perro tiene potencial para una reacción violenta, por lo que tenemos que entender exactamente lo que está sucediendo. Luchan lo que causa el miedo, o huir de ella. Muchos perros muestran signos de ser agresivo, mientras que otros temblar, tiemblan y se esconden. La identificación de la fuente del ataque de pánico y tratar la causa es el primer paso para eliminar el problema.
Exponer a su perro a diferentes situaciones y ambientes sociales antes de los 14 semanas de edad disminuirá la probabilidad de que el comportamiento temeroso de que pudiera dar lugar a ataques de pánico. Su cachorro no tendrá que convertirse en una mariposa social para evitar ser habitualmente temeroso. Una cantidad mínima de exposición durante estas semanas de formación ayudará a socializar a su cachorro.
Entrenamiento conductual es eficaz en la enseñanza de su perro a reaccionar a la fuente del miedo. Se necesita paciencia y esfuerzo para disciplinar a su perro, pero aliviará el sufrimiento y el estrés excesivo. Cuando se expone a la causa de su pánico, tranquilizarlos con un poco de amor y atención. Utilizando el método de la terapia de exposición ayudará a que su mascota aprenda que no hay nada que temer. Haciendo que su perro se sienta segura es importante para ayudar a lidiar con el miedo.
Si usted sospecha que su perro puede tener ataques de pánico, lo primero que debe hacer es llevarlo al veterinario para un chequeo de salud bueno. Ellos entienden cómo los animales frente a la ansiedad, el estrés y el dolor. Otras condiciones se puede descartar que podría ser la causa del comportamiento.
Si su veterinario diagnostica un simple miedo, ansiedad o fobia, un medicamento prescrito puede ser todo lo que se necesita. Podrán proponer otro tipo de técnicas conductuales que puede utilizar para aliviar los temores de su perro y las ansiedades.
Si hay una condición física subyacente que causa los ataques de pánico los perros, el veterinario podrá prescribir cualquier medicamento. Nunca le dé a su perro cualquier medicamento destinado al consumo humano, esto puede ser fatal.
Algunas causas comunes pueden ser: reacción natural ante la amenaza, la ansiedad de separación, las tormentas, los extranjeros, la aversión a las personas de una cierta edad, raza o sexo, el miedo de otros perros, niños que viajan en vehículos, fuegos artificiales estacionales, pisos lisos, miedo de una experiencia terrible o ser puesto en una jaula.
Signos evidentes de lesión, sentirse indispuesto o irritable, un cambio en los hábitos de comer o dormir podría ser una señal de problemas subyacentes y aumentar el potencial de su perro que sufre un ataque de pánico.
Los ataques de perros de pánico puede ser un problema real. Un ataque de pánico perro tiene potencial para una reacción violenta, por lo que tenemos que entender exactamente lo que está sucediendo. Luchan lo que causa el miedo, o huir de ella. Muchos perros muestran signos de ser agresivo, mientras que otros temblar, tiemblan y se esconden. La identificación de la fuente del ataque de pánico y tratar la causa es el primer paso para eliminar el problema.
Exponer a su perro a diferentes situaciones y ambientes sociales antes de los 14 semanas de edad disminuirá la probabilidad de que el comportamiento temeroso de que pudiera dar lugar a ataques de pánico. Su cachorro no tendrá que convertirse en una mariposa social para evitar ser habitualmente temeroso. Una cantidad mínima de exposición durante estas semanas de formación ayudará a socializar a su cachorro.
Entrenamiento conductual es eficaz en la enseñanza de su perro a reaccionar a la fuente del miedo. Se necesita paciencia y esfuerzo para disciplinar a su perro, pero aliviará el sufrimiento y el estrés excesivo. Cuando se expone a la causa de su pánico, tranquilizarlos con un poco de amor y atención. Utilizando el método de la terapia de exposición ayudará a que su mascota aprenda que no hay nada que temer. Haciendo que su perro se sienta segura es importante para ayudar a lidiar con el miedo.
Si usted sospecha que su perro puede tener ataques de pánico, lo primero que debe hacer es llevarlo al veterinario para un chequeo de salud bueno. Ellos entienden cómo los animales frente a la ansiedad, el estrés y el dolor. Otras condiciones se puede descartar que podría ser la causa del comportamiento.
Si su veterinario diagnostica un simple miedo, ansiedad o fobia, un medicamento prescrito puede ser todo lo que se necesita. Podrán proponer otro tipo de técnicas conductuales que puede utilizar para aliviar los temores de su perro y las ansiedades.
Si hay una condición física subyacente que causa los ataques de pánico los perros, el veterinario podrá prescribir cualquier medicamento. Nunca le dé a su perro cualquier medicamento destinado al consumo humano, esto puede ser fatal.