Esta raza también debe su nombre a la caza, pues el significado de la palabra setter proviene del inglés instalar, detener, lo que describe su función de mantenerse estático indicando donde se ha ocultado o donde ha caído la presa. Aunque no se sabe con exactitud su origen se puede decir que es conocido desde la edad media en las regiones de Francia. La utilidad de cazador le fue dada sobre todo en Inglaterra. Su capacidad le permite encontrar a la presa mucho tiempo después de que haya pasado por un cierto lugar, el sigue sintiendo su olor y podrá seguir su camino
