Si el animal queda encerrado en un auto, bajo pleno sol, puede sobrevenir el temible golpe de calor, el accidente más frecuente del verano. No olvide que un vehículo dejado bajo la sombra de un árbol o de un edificio, puede estar a pleno sol unos minutos u horas más tarde.
La temperatura asciende rápidamente en un auto cuando los vidrios están cerrados. La temperatura del animal se elevará rápidamente: entonces jadeará, se babeará y, si no es rápidamente atendido, se deshidratará. El golpe de calor es una congestión cerebral que puede resultar fatal. Recordemos que los perros y gatos no eliminan el calor de la misma forma que nosotros: ellos están desprovistos de glándulas sudoríparas, salvo a nivel de las plantas del pie, y no transpiran.
La regulación de su temperatura interna se realiza mediante ventilación rápida (aceleración de la respiración) a través de la boca abierta. Este mecanismo no funciona si el aire del ambiente está recalentado. Por el contrario, el proceso genera un aumento de la temperatura interna, que puede alcanzar los 42 grados centígrados y más, lo que sirve para eliminar naturalmente el calor por flujo hacia el ambiente, que está más frío.
Obviamente, si el aire externo supera los 42 grados-dentro de un auto ceirado al sol puede elevar la temperatura a 60 grados o más- este flujo no se produce, y el animal puede morir por acumulación interna de calor. Las primeras medidas después de un golpe de calor consisten en llevar al animal a un sitio fresco y con abundante aire, donde se lo cubrirá con paños mojados, se le colocará hielo o, directamente, se lo sumergirá en agua fría para lograr el descenso de su temperatura interna. Luego debe llevárselo con urgencia al veterinario.
Es útil recordar que en algunas zonas balnearias, especialmente en Europa, los bomberos y policías están autorizados a romper los vidrios de un vehículo si perciben que dentro hay un animal con riesgos de sufrir un golpe de calor. Sin dudas, una medida digna de imitar.
Para no arriesgarse a semejante consecuencia, será preferible que evite dejar al animal encerrado mucho tiempo dentro del auto. Y si no tiene otro remedio que hacerlo, deje las ventanillas de ambos lados lo suficientemente bajas como para que no pueda escapar ,pero que al mismo tiempo permitan una buena circulación de aire.
La temperatura asciende rápidamente en un auto cuando los vidrios están cerrados. La temperatura del animal se elevará rápidamente: entonces jadeará, se babeará y, si no es rápidamente atendido, se deshidratará. El golpe de calor es una congestión cerebral que puede resultar fatal. Recordemos que los perros y gatos no eliminan el calor de la misma forma que nosotros: ellos están desprovistos de glándulas sudoríparas, salvo a nivel de las plantas del pie, y no transpiran.
La regulación de su temperatura interna se realiza mediante ventilación rápida (aceleración de la respiración) a través de la boca abierta. Este mecanismo no funciona si el aire del ambiente está recalentado. Por el contrario, el proceso genera un aumento de la temperatura interna, que puede alcanzar los 42 grados centígrados y más, lo que sirve para eliminar naturalmente el calor por flujo hacia el ambiente, que está más frío.
Obviamente, si el aire externo supera los 42 grados-dentro de un auto ceirado al sol puede elevar la temperatura a 60 grados o más- este flujo no se produce, y el animal puede morir por acumulación interna de calor. Las primeras medidas después de un golpe de calor consisten en llevar al animal a un sitio fresco y con abundante aire, donde se lo cubrirá con paños mojados, se le colocará hielo o, directamente, se lo sumergirá en agua fría para lograr el descenso de su temperatura interna. Luego debe llevárselo con urgencia al veterinario.
Es útil recordar que en algunas zonas balnearias, especialmente en Europa, los bomberos y policías están autorizados a romper los vidrios de un vehículo si perciben que dentro hay un animal con riesgos de sufrir un golpe de calor. Sin dudas, una medida digna de imitar.
Para no arriesgarse a semejante consecuencia, será preferible que evite dejar al animal encerrado mucho tiempo dentro del auto. Y si no tiene otro remedio que hacerlo, deje las ventanillas de ambos lados lo suficientemente bajas como para que no pueda escapar ,pero que al mismo tiempo permitan una buena circulación de aire.
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