Sobre 100 ejemplares examinados en España para comprobar y estudiar así en qué situación se encontraba el carácter de la raza en ese país, se realizaron las siguientes pruebas, como la de reacción al disparo, la reacción ante un extraño inofensivo, la reacción ante uno ofensivo y la presencia de timidez o hipersensibilidad en sus ejemplares.
Reacción ante el disparo
La dureza psicofísica de un perro fue medida de la siguiente manera, consistía en efectuar disparos con una pistola de 8 mm (3 detonaciones con intervalos de 5"), la distancia era 40 m. y el perro estaba en posición de sentado y estable; se le otorgaba la clasificación de excelente cuando el animal no se movía de su lugar y sólo mantenía el reflejo de orientación hacia el lugar de donde provenía el disparo. Con la clasificación de suficiente, si el perro mostraba un mínimo signo de inseguridad, e insuficiente, ante muestras claras de miedo o pánico.
Ante el extraño inofensivo
En este punto la seguridad del perro se valora muy bien ante el extraño que se acerca en forma amistosa o inofensiva. El perro seguro y con calificación de excelente se mostrará indiferente o sociable, dependiendo de la raza, el suficiente es el que se muestra receloso de ser tocado, aunque finalmente se socializa. El insuficiente es el que agrede, se inhibe o sale corriendo. Recordemos que la agresividad es en muchos casos el recurso ante la inseguridad.
Ante el extraño ofensivo
El equilibrio perfecto es cuando es sociable o indiferente con el inofensivo y es agresivo o combativo, con el ofensivo. La prueba consta de un perro sujeto por la correa y un figurante realizando una amenaza clara y fuerte intentando suscitar el instinto de defensa del perro. La respuesta es excelente cuando el perro mostraba signos de agresividad activa y tiraba de la correa con impulso y valor (no era necesario que mordiese), la respuesta suficiente cuando el perro mostraba agresividad activa pero sin impulsos ni combatividad e insuficiente, cuando el perro mostraba claramente agresividad pero acompañada de miedo o pánico, o permanecía inhibido.
Pruebas de timidez
Esta expresión de inseguridad o miedo, que un individuo tiene ante un nuevo estímulo, puede tener 2 formas de expresión, la primera inhibición, desconfianza o miedo del objeto intimidatorio; de persistir la intimidación puede haber síntomas psicofisiológicos, como temblor, relajación de esfínteres, etc.
La segunda es mediante la compensación de la timidez o agresión por evitar el estímulo intimidante. Esta agresión cargada de miedo es a veces peligrosa cuando volvemos la cara al animal, huimos o manifestamos miedo; aquí la timidez se midió introduciendo el ejemplar en una canilera nueva para él y después de 2 días de adaptación al lugar, un extraño en forma amable entraba y alargaba la mano. Se valoró como negativa o ausencia de timidez al perro que acudía al saludo, y se sociabilizaba o mostraba indiferencia. La timidez positiva quedaba demostrada en el animal que se mostraba inseguro, receloso, huía o agredía con miedo.
Tipo de sensibilidad
En este caso se mide el grado de resistencia al stress, al castigo y a las voces autoritarias, etc. definiendo al perro hipersensible como al perro blando, que posee un umbral de excitación muy bajo y un estímulo negativo que esté por encima de ese umbral.
Reacción ante el disparo
La dureza psicofísica de un perro fue medida de la siguiente manera, consistía en efectuar disparos con una pistola de 8 mm (3 detonaciones con intervalos de 5"), la distancia era 40 m. y el perro estaba en posición de sentado y estable; se le otorgaba la clasificación de excelente cuando el animal no se movía de su lugar y sólo mantenía el reflejo de orientación hacia el lugar de donde provenía el disparo. Con la clasificación de suficiente, si el perro mostraba un mínimo signo de inseguridad, e insuficiente, ante muestras claras de miedo o pánico.
Ante el extraño inofensivo
En este punto la seguridad del perro se valora muy bien ante el extraño que se acerca en forma amistosa o inofensiva. El perro seguro y con calificación de excelente se mostrará indiferente o sociable, dependiendo de la raza, el suficiente es el que se muestra receloso de ser tocado, aunque finalmente se socializa. El insuficiente es el que agrede, se inhibe o sale corriendo. Recordemos que la agresividad es en muchos casos el recurso ante la inseguridad.
Ante el extraño ofensivo
El equilibrio perfecto es cuando es sociable o indiferente con el inofensivo y es agresivo o combativo, con el ofensivo. La prueba consta de un perro sujeto por la correa y un figurante realizando una amenaza clara y fuerte intentando suscitar el instinto de defensa del perro. La respuesta es excelente cuando el perro mostraba signos de agresividad activa y tiraba de la correa con impulso y valor (no era necesario que mordiese), la respuesta suficiente cuando el perro mostraba agresividad activa pero sin impulsos ni combatividad e insuficiente, cuando el perro mostraba claramente agresividad pero acompañada de miedo o pánico, o permanecía inhibido.
Pruebas de timidez
Esta expresión de inseguridad o miedo, que un individuo tiene ante un nuevo estímulo, puede tener 2 formas de expresión, la primera inhibición, desconfianza o miedo del objeto intimidatorio; de persistir la intimidación puede haber síntomas psicofisiológicos, como temblor, relajación de esfínteres, etc.
La segunda es mediante la compensación de la timidez o agresión por evitar el estímulo intimidante. Esta agresión cargada de miedo es a veces peligrosa cuando volvemos la cara al animal, huimos o manifestamos miedo; aquí la timidez se midió introduciendo el ejemplar en una canilera nueva para él y después de 2 días de adaptación al lugar, un extraño en forma amable entraba y alargaba la mano. Se valoró como negativa o ausencia de timidez al perro que acudía al saludo, y se sociabilizaba o mostraba indiferencia. La timidez positiva quedaba demostrada en el animal que se mostraba inseguro, receloso, huía o agredía con miedo.
Tipo de sensibilidad
En este caso se mide el grado de resistencia al stress, al castigo y a las voces autoritarias, etc. definiendo al perro hipersensible como al perro blando, que posee un umbral de excitación muy bajo y un estímulo negativo que esté por encima de ese umbral.
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